
ESTIMULACIÓN ACUÁTICA.
La estimulación acuática es una actividad que se lleva a cabo en el agua, generalmente en piscinas, y está diseñada para favorecer el desarrollo integral de los niños, especialmente en sus primeros años de vida. Esta práctica combina ejercicios, juegos y técnicas específicas que aprovechan las propiedades del agua, como la flotación, la resistencia y la temperatura, para estimular el crecimiento físico, cognitivo, emocional y social de los niños.
Uno de los principales beneficios de la estimulación acuática es el desarrollo físico y motor. El agua ofrece una resistencia natural que ayuda a fortalecer los músculos del niño sin impactos bruscos en las articulaciones, lo que es ideal para su crecimiento. Además, los movimientos en el agua requieren un mayor control corporal, lo que favorece la coordinación, el equilibrio y la motricidad gruesa.